Las hay digitales y analógicas, de Polaroid y de otras marcas. Las tienes en mil colores, pero todas ellas tienen algo en común: te permiten tocar las fotos que acabas de tomar. Aquí te ayudamos a elegir el modelo.
Una cámara de fotos instantánea para todos
No tiene misterio: una cámara instantánea es aquella que permite al usuario disponer de una copia en papel en cuestión de segundos o minutos gracias a un proceso de autorrevelado o impresión.
Se suele señalar a Edwin Land, fundador de Polaroid, como el creador de la primera cámara instantánea allá por 1948. Se trataba de la Polaroid 98 Land Camera, y pese a no ser realmente pionera en esto del revelado instantáneo, sí fue la primera cámara instantánea comercialmente viable por su gran facilidad de uso y transporte. Con razón se convirtió rápidamente en un producto muy popular.
¿Son las actuales cámaras instantáneas más o menos iguales que las antiguas Polaroid? Aunque usan emulsiones distintas, las hay que siguen la estela de los modelos pioneros, como las cámaras de Polaroid Originals (hoy en día Polaroid a secas) o la mayoría de modelos Fujfilm Instax.
Pero luego hay un nutrido grupo de cámaras instantáneas digitales que en vez de revelar las fotos (positivar el negativo), las imprimen, como las de Kodak y ciertos modelos de Polaroid que ya no se fabrican.
Cámaras instantáneas digitales: lo mejor de los dos mundos
Las cámaras instantáneas y digitales de Polaroid (licenciadas a la firma estadounidense C&A) y Kodak cuentan todas ellas con sensor de imagen, memoria sólida (interna o mediante tarjetas extraíbles como las que usa cualquier cámara digital) y un sistema de impresión que puede estar basado en la tecnología sin tinta Zink (Zero ink) o 4Pass, esta última de mayor calidad que la anterior.
Ambas tecnologías permiten obtener copias en papel en cuestión de segundos. No hay revelado químico como en las Polaroid de antaño, y esto permite reducir el coste por copia. Se trata además de un papel resistente a los arañazos y al contacto superficial con agua.
Algunas de estas cámaras tiene pantalla, lo cual permite elegir las fotos que queremos imprimir y normalmente editarlas. Y en muchos casos cuentan con algún tipo de conexión inalámbrica (Wi-Fi o Bluetooth) para poder imprimir las fotos que tenemos en el teléfono.
En resumen, estas cámaras son la mejor forma de disfrutar de la magia de la fotografía instantánea sin renunciar a las ventajas típicas del formato digital.
Kodak Mini Shot Combo 2 Retro
Kodak Mini Shot Combo 3 Retro
Kodak Smile Classic
Kodak Step
Polaroid Mint Instant Print Camera
Cámaras instantáneas con revelado químico
Polaroid y Fujifilm forman el otro gran grupo, al que también hay que sumar marcas como Leica y Lomography, que en realidad usan película Instax de Fujifilm.
Estas cámaras instantáneas cuentan con un sistema de autorrevelado que positiva el negativo mediante un proceso químico. A diferencia del papel Zink, esta película no puede estar expuesta a la luz antes del revelado porque se velaría y quedaría inutilizada.
Aquí la foto que tomamos es la que aflora como por arte de magia en el papel unos segundos después (más bien minutos) de pulsar el disparador. No es posible elegirla mediante una pantalla ni transmitirla desde un teléfono móvil.
En muchas de estas cámaras resulta complicado dar con la exposición correcta, y cada vez que lo intentamos podemos tener la sensación de que va sonando el sonido de una caja registradora de fondo porque no hay marcha atrás.
La excepción la pone la reciente Fujifilm Instax SQ10 y sus sucesoras, que mezclan tecnología digital (como en las cámaras Polaroid y Kodak) con revelado químico. El resultado es una cámara instantánea híbrida.